Los bloqueos de la personalidad pertenecen a la personalidad. Entonces no hay que identificarse con la personalidad. Hay un nivel de nosotros que está más allá de los sufrimientos.
Tú no eres tus sufrimientos.
El problema de la personalidad es que está persuadida de que ella es el sufrimiento, el estado que vive en el instante en que lo vive porque, cualesquiera que sean nuestras edades, tenemos el hábito de identificarnos con un sufrimiento, con el problema. Pero nosotros no somos esos problemas. Necesitamos de alguna forma, tomar distancia en relación a nosotros mismos es decir que, mientras que juguemos el juego de la personalidad, evidentemente, cuando tenemos un sufrimiento, somos nosotros los que sufrimos. Pero, a nivel psicológico, es aun más fácil de comprender. Si hay una emoción, si hay un sufrimiento, cualquiera que sea la clase de sufrimiento, mientras que estemos identificados con este sufrimiento, no tenemos ningún medio de salir o si no, para salir de esto hay que aceptar, para vivir que no somos nuestro sufrimiento. Es tan sencillo como esto. Aceptar no identificarse con tus propios sufrimientos, comprender que tú no eres eso, permitirnos ir hacia otra cosa. Pero, mientras que nos identifiquemos con nuestro propio sufrimiento, no hay ninguna razón de que este sufrimiento, sea transcendido o que desaparezca.