La auténtica observación es aquella en la que no hay juicio ni intención. Simplemente mirar algo y permitir que los ojos del universo miren a través de nosotros. El ser uno con la experiencia sin que la mente egoica medie e interfiera hará que veamos con claridad lo que es. La iluminación será un hecho en ese instante. Surgirá sin esfuerzo el siguiente paso, se mostrará delante nuestro, sin que haya un yo que necesite saber, actuar, decidir,…
Cuando esto se da, la vida no supone un esfuerzo, ya que no hay un yo que tenga que vivirla, simplemente la vida se vive a través nuestra. Sé que muchos dirán que esto es complicado, ese es el primer argumento de la mente que no quiere perder su reino, pero ¿y si fuera más sencillo de lo que pensamos? y ¿si no se tratase de hacer? y ¿si tan sólo se tratase de no hacer, de dejar de hacer?…. así suena mejor no…
Soy consciente de que la mente se nos irá mucho, porque es su función, ya que sirve para sobrevivir no para vivir y su objetivo es estar alerta, buscando peligros. Así que la historia es decirle, gracias pero ya no hay peligro, descansa y vivamos….
Bueno esta es la reflexión con la que me levanté hoy….
Buen jueves!!!!!!