¿Eres alguna imagen que aparece en tu mente ?
¿Eres alguna sensación qué aparece en tu cuerpo ?
¿Eres alguna emoción qué pasa por tu cuerpo o tu mente?
¿Eres algo qué alguien dice que tú eres?
o ¿eres la rebeldía contra algo que alguien ha dicho qué eres?
Estos son algunos de los muchos errores de identificación.
Todas estas definiciones vienen y se van, nacen y después mueren. No se puede definir, darle nombre a la verdad de quien eres. Palabras como alma, luz, Dios, verdad, ser, conciencia son insuficientes como descripción de la inmensidad de quien eres realmente, como un niño, un adolescente, una madre, un padre, una persona saludable, enferma, alegre o iluminada siempre detrás de todo eso, está la verdad de ti mismo. No es ajena a ti Está tan cerca que no puedes creer que eres tú. No existe un concepto para definir la verdad de quien eres.
La verdad de quien eres está libre de todo eso.
Ya eres libre y todo lo que te impide lograr esa libertad es tu apego a alguna idea sobre quien eres. Tú ya eres eso, te separa el descubrimiento de quien eres realmente.
Deja que tu atención se sumerja en aquello que siempre ha estado ahí esperando abiertamente por su propio autodescubrimiento.
¿Quién eres realmente?
No tienes un alma, eres un alma que tiene un cuerpo.